IDEAS
La batería del futuro
La creciente preocupación por el futuro de nuestro planeta ha llevado a los científicos a buscar nuevas soluciones más allá del reciclaje, es decir, en vez de reciclar baterías, la comunidad científica se ha esforzado por crear nuevas formas de almacenar energía para incrementar la eficiencia de su uso.
Uno de los inventos que surgieron gracias a esto fueron las baterías de flujo. Sin embargo, su diseño y composición no eran del todo brillantes, y, si bien cumplían con su propósito, era imposible implementarlas en una casa para proporcionar energía de manera eficiente y segura. Pero, una versión mejorada de estas podría cambiar dicha situación, afirma el artículo de ZME Science, titulado “Non-toxic, non-corrosive flow battery could last for more than a decade”, sobre el cuan hemos recreado esta nota.
Las baterías de flujo no son como las baterías tradicionales. En este caso, el aparato está compuesto de un tanque, en el que se almacena una solución que contiene electrolitos disueltos y, al revertirlos, son capaces de brindar energía a la célula que controla la batería. Lo más interesante es que, a diferencia de las baterías tradicionales, estas son capaces de durar un tiempo mucho mayor sin reducir su capacidad de almacenamiento de energía. Esto significa que duran más que cualquier otra batería.
El problema de su diseño es que los electrolitos están hechos de químicos sumamente agresivos, como el vanadio o metales raros y nobles. Esto hace que su implementación en hogares sea imposible, ya que, si el líquido dentro del tanque llegara a derramarse, disolvería todo a su alrededor, lo cual podría llevar a accidentes graves.
Sin embargo, esta situación podría cambiar ya que investigadores de la Escuela de Ingeniería y Ciencias Aplicadas de Harvard John A. Paulson (SEAS, por sus siglas en inglés) han encontrado una forma de hacer más seguras estas baterías.
Su método consiste en disolver los electrolitos en agua neutral, lo cual hace que la batería dure lo mismo, pero la hace segura y con menos requerimientos de mantenimiento. Los investigadores consiguieron esto investigando porqué los químicos se degradaban si es que se les sumergía en una solución neutral, como el agua neutral. Luego de descubrir la razón de esto, por medio de constantes prueba-error, los investigadores modificaron ligeramente la estructura molecular de los químicos para permitir que se mantengan en una solución más segura sin que pierdan su capacidad de contener y preservar energía.
De esta forma, se podría implementar esta batería para que provea energía a una casa, reduciendo la necesidad de conseguir electricidad de fuentes dañinas para el medio ambiente.
Publicar un comentario