La hora del chocolate artesanal

Una vez agotada la polémica entre lo que es chocolate y lo que no lo es, probablemente el siguiente tema que puede plantear un debate es si hay o no diferencias entre un chocolate industrial y uno artesanal y si efectivamente estas tienen un significado o un valor en el mercado.

Un reciente artículo publicado por FoodBusiness, titulado A defining moment for craft chocolate, plantea que actualmente se vive un gran momento para el chocolate artesanal y sugiere algunos atributos que distinguen al chocolate artesanal respecto al industrial.

Según Brad Kintzer, jefe de chocolateros de TCHO Chocolate, los consumidores están en búsqueda de experiencias diferentes, lo cual es una oportunidad para los chocolateros artesanales, aun cuando esas experiencias pueden ser algo más costosas.

Los retos no son pocos, y Kintzar señala algunos.

El sabor. Uno de los aspectos que más deben cuidar los chocolateros artesanales es el cacao con el que trabajan.

El aprovisionamiento ético. Cada vez más los consumidores están atentos a que los productos que consumen provengan de una cadena de valor sostenible y el abastecimiento ético y el trato justo de los productores de cacao es fundamental.

Envases sencillos. Un buen chocolate no tiene una gran carga de ingredientes, todo lo contrario, lo que destaca es el porcentaje de cacao que contiene y, en todo caso, el azúcar y algún otro insumo para darle alguna característica particular.

Calidad. Empresas como TCHO que manejan una línea artesanal han instalado infraestructuras mejoradas en cooperativas de productores con los cuales trabajan, y han reemplazado herramientas rudimentarias para fermentar y secar granos de cacao con el fin de mejorar calidad y hacerla más homogénea en los granos que usan.

Todas estas particularidades del chocolate artesanal lo hacen un poco más costoso, pero desde la perspectiva de los chocolateros, aun es un lujo que puede ser asequible.

Ya son los consumidores quienes deciden qué tipo de chocolate quieren llevarse a la boca, con qué porcentaje de cacao, si les importa de dónde proviene, qué tan sostenible es o los ingredientes que contiene y si está dispuesto a pagar por todos esos atributos en conjunto.