Los vuelos y la contaminación

En el mundo existen diversos tipos de contaminación, una de las más importantes en cuanto a los efectos causados, es la contaminación del aire, siendo el dióxido de carbono (CO2) el compuesto más contaminante y el que causa mayor calentamiento global. El artículo “Transportation, the great protagonist Of Climate Change”, señala que casi la cuarta parte de emisiones de CO2 relacionadas con la energía, es atribuible al transporte, siendo los aviones los que tienen mayor participación.

La globalización y el aumento del poder adquisitivo han generado el incremento del número vuelos comerciales, es así que, la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) estima que se alcance los 8,200 millones de pasajeros para el 2037, mientras que el fabricante de aviones Boeing prevé que habrá una demanda de más de 42,700 nuevas aeronaves durante los próximos 20 años (BBC, 2019). Este crecimiento tendrá un impacto negativo, y es que según el mismo artículo, las emisiones relacionadas con el transporte aéreo ahora representan más del 2% de las emisiones globales y se proyecta un aumento del 70% para 2020 en comparación con el 2005 y un aumento adicional del 300% al 700% para el 2050.

Entonces ¿la solución es volar menos?, esto no sería factible ya que el acceso a muchos lugares es a través de la vía aérea, sin embargo, existen alternativas de nuevas tecnologías  que podrían implementarse, si bien es cierto, estas aún no son suficientes para contrarrestar la contaminación, resulta más viable que el impedir viajar a las personas, más aún cuando, según un artículo de (Tendencias 21, 2018), el sector turismo mueve 1,4 billones de dólares cada año y supone el 7% de todas las exportaciones de bienes y servicios del mundo.