NÚMEROS
Las aves marinas y el cambio climático
Un nuevo estudio publicado por la Universidad de Washington encontró que entre el verano de 2015 y la primavera de 2016 murieron aproximadamente un millón de aves, debido al calentamiento del Océano Pacífico. Así lo dio a conocer una interesante nota de The Guardian, titulada Huge “hot blob” in Pacific Ocean killed nearly a milliion seabirds.
Esto explica que los funcionarios de vida silvestre de Alaska pidieran a las comunidades costeras de Alaska que informaran sobre las aves marinas muertas y moribundas que aparecieran en las playas debido a que muchos de los cadáveres de estas aves nunca llegan a la Costa.
La principal causa de estas muertes sería una masa de calor gigante que es causada por El Fenómeno El Niño que aceleró el calentamiento de las temperaturas a partir de 2015 y, en 2016, el aumento del calor resultó en temperaturas del agua de casi 11F (6C) por encima del promedio.
Los mapas de calor en ese momento mostraban un enorme globo rojo creciendo, que abarcaba más de 380,000 millas cuadradas que equivale a 1,5 veces el tamaño de Texas o cuatro veces el tamaño de Nueva Zelanda.
El estudio encontró que las aves murieron de hambre debido a que no había pescado suficiente y ellas requieren comer la mitad de su peso corporal para sobrevivir. Cuando el agua se calientan las aguas oceánicas, las aves compiten con otras especies por el alimento.
Julia Parrish, coautora del estudio y profesora de la Universidad de Washington en la Facultad de Ciencias Acuáticas y Pesqueras, dijo que como consecuencia de lo que ocurrió hubo una reducción en los procesos reproductivos de las aves de 2015 y 2016, cuando más de 15 especies no produjeron un solo pollito.
Lo ocurrido, según indicó John Piatt, el investigador principal del estudio, refleja el tremendo impacto que el calentamiento oceánico puede tener en el ecosistema marino y los pronósticos sobre el calentamiento global hacen pensar que esta circunstancia se podría repetir.
Es más, actualmente otra gran masa de calor se ha formado frente a la costa de Washington y hasta el Golfo de Alaska, y está creciendo.
En nuestro país cada vez que el mar se caliente se observa el mismo conflicto entre especies e incluso con el ser humano. Los pescadores artesanales matan a los lobos marinos que interceptan sus redes de pesca en busca de alimento.
Publicar un comentario