La apuesta de Apple por la diversidad

Tener más mujeres, más minorías étnicas, diferentes nacionalidades, personas con distintas opciones sexuales, o incluso con distintos perfiles de formación profesional en las organizaciones no es una tarea sencilla ni siquiera para las empresas más grandes del mundo. Todo lo contrario, es parte de un proceso que toma tiempo para poder mostrar resultados como ha señalado Denise Young Smith, la responsable de los recursos humanos de Apple, quien participó de un Brainstorm Tech organizado por Fortune.

Su intervención fue sumamente ilustrativa porque permitió saber que Apple tiene una perspectiva particular de la diversidad:

• Ha asumido la diversidad como un reto. Sin embargo, este cambio no se produjo de un día para el otro.
• Tiene ahora a la diversidad como un concepto que forma parte de la estrategia de adquisición de talento porque precisamente diversidad forma parte del legado de Apple.
• Sabe que se requiere una gran concientización y enfoque para mejorar la diversidad, sobre todo si se tiene en cuenta que el foco de la empresa es crear nuevos productos y crecer.
• Reconoce que de las 98 mil personas (que incluye a personal de las Apple Store) que trabajan para Apple en el mundo, por ahora aun el 70% son hombres.

Young Smith, la encargada de impulsar la diversidad en la gigante de Cupertino es una mujer afroamericana y es a quien la empresa ha destacado como parte de su enfoque en la diversidad. Junto con ella, Tim Cook ha nombrado a otras mujeres en cargos importantes como Angela Ahrendts, la antigua presidenta ejecutiva de Burberry, que ahora es la directora de las tiendas físicas y digitales de Apple, entre otras.

Quizás la mayor demostración de la diversidad en la que cree Apple, la dio el propio Steve Jobs cuando nombró a Tim Cook como su sucesor, quien el año pasado hizo público que se siente orgulloso de ser gay y se comprometió a usar su liderazgo para llamar la atención sobre la discriminación que sufren algunas minorías.

El caso de Apple debe servir de ejemplo de lo importante que es no solo hablar de diversidad y perspectiva de género sino actuar en consecuencia, no porque sea políticamente correcto o empresarialmente beneficioso sino porque enriquece a las organizaciones, las humaniza y las hace más empáticas con la sociedad.