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La IA revolucionará las leyes de propiedad intelectual

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La IA generativa podría obligar a cambiar lo que se entiende por "concepción" de la creación en el derecho de patentes.
01 de mayo de 2023
Red star
Por qué es importante
La clave está en el reconocimiento que se pueda dar a la actividad generativa independiente de la IA que hoy la mayoría de juristas aún discute.

En medio de la guerra de los gigantes de la tecnología por estar un paso adelante en la incorporación de la inteligencia artificial (IA) a su industria, la Corte Suprema de los EEUU ha rechazado el intento del ciudadano Stephen Thaler de obtener derechos de propiedad intelectual para un sistema creado por la IA.
Según Richard Waters, en una nota publicada en el Financial Times, los jueces han confirmado el análisis realizado por instancias inferiores que señalaron que solo las personas físicas pueden obtener protección de patentes y no procede que un sistema de inteligencia artificial sea nombrado como inventor de una patente porque eso iría en contra de la esencia del régimen de propiedad intelectual.
Por ahora, la decisión de la Corte Suprema ha bloqueado la posibilidad de que se reconozca que la IA ha igualado la creatividad humana, pero la decisión no ha aclarado otras amenazas que existen a la legislación de propiedad intelectual.
La Oficina de Patentes y Marcas Registradas de los EEUU en su intervención manifestó que el reconocimiento de invenciones de IA generativa podría llevar a transformar el sistema de patentes, sobre todo en el caso de los semiconductores y las nuevas ideas de moléculas para fármacos.
Por ahora, en tanto la IA sea usada en apoyo de los seres humanos y para plasmar sus ideas, no se puede patentar nada a nombre de un sistema de IA que no actúe independientemente, pero no hay que descartar la posibilidad de que, en un escenario distinto, se tenga que revisar el sistema de patentes.
Según Thaler, en entrevista con FT, su sistema Dabus fue diseñado para generar nuevas ideas sin dirección o supervisión humana, lo que significa que sus ideas no se pueden atribuir a un inventor humano, por lo que es un precursor de los llamados sistemas de inteligencia general artificial que algún día igualarán los niveles humanos de inteligencia y que deben ser reconocidos.
La demanda de Thaler no es la primera que enfrenta la Oficina de Patentes y Marcas Registradas de los EEUU. Hace tres años, en otro caso, concluyó que la mayoría de expertos señalaron que la IA no puede realizar invenciones sin intervención del ser humano, algo que hoy se discute en el caso de la IA generativa.
Por ello, en la audiencia ante la Corte Suprema, ha sostenido que las ideas o “invenciones” generadas por IA se deben atribuir a las personas que diseñan, capacitan o interpretan los resultados producidos por IA. Sin embargo, el tema seguirá en discusión porque algunos juristas sostienen que hay que ampliar el análisis que se hace de la “concepción” de la idea y la participación de la IA en la misma. Si eso no ocurre, hacia futuro, muchas patentes podrían quedar fuera de la protección de las leyes de propiedad intelectual porque es la IA la que más ha participado en la “concepción” de la idea y no se puede atribuir a ninguna persona física.