Adictos a smartphones aumentaron 59%

Cada vez más personas en el mundo (y en el Perú) tienen un smartphone. En el mundo, el número de usuarios se incrementó el último año en 38%, de 1.3 miles de millones a 1.8 miles de millones, según un estudio de Flurry. 

Si bien no existen estadísticas disponibles respecto del tiempo promedio diario que pasamos utilizando nuestros dispositivos, se estima que este supera las 3 horas y que el 90% de este tiempo lo dedicamos al uso de apps. Este patrón de uso, sin lugar a dudas, afecta nuestros niveles de estrés, capacidad de concentración y, por supuesto, productividad.

Por supuesto, que estos efectos varían de persona en persona. Por ejemplo, actualmente es posible dividir a los usuarios de smartphones hasta en tres grupos a partir de la intensidad del uso que hacen de las apps: 

• El primero es de los usuarios regulares que utilizan las apps de su teléfono entre 1 y 16 veces por día; 
• El segundo es de los usuarios intensivos que utilizan las apps de su teléfono entre 16 y 60 veces por día; y
• El tercero es de los usuarios adictos a los teléfonos móviles que utilizan las apps de su teléfono más de 60 veces por día. 

Respecto de la población adicta al uso de smartphones en el mundo, dos son sus principales características: 

• En primer lugar, su magnitud es enorme. Actualmente, se estima que el número de usuarios adictos a los teléfonos móviles en el mundo asciende a 280 millones de personas. Esta cifra equivale al 15% del total de usuarios de smartphones en el mundo. Si el número de usuarios adictos formaran un país, este sería de un tamaño cercano al de Estados Unidos. 
• En segundo lugar, la velocidad a la que está creciendo el número de adictos es enorme. Así por ejemplo, la velocidad a la que creció el número de usuarios adictos es más del doble de rápida (59%) que la del primer grupo (25%) de usuarios regulares. Por su parte, el número de usuarios intensivos creció 34% en el último año. 

Estos resultados son muy importantes porque nos permiten reflexionar sobre el tiempo que le dedicamos al uso de nuestros smartphones y nos pueden ayudar a tomar las acciones correctivas para evitar pasar a formar parte del grupo de los adictos.