PERSONAS
El superhéroe de los peatones
Jorge Cáñez es un jóven de 29 años graduado en ciencias políticas que trabaja para el gobierno de la Ciudad de México. Dos veces a la semana se viste como el superhéroe que inventó en 2012, Peatonito. Peatonito sale a las calles a hacer visible las infracciones de tránsito que cometen los conductores contra los peatones. Por ejemplo, es común verle por las calles de Ciudad de México haciendo retroceder a los automóviles que bloquean los cruceros peatonales o improvisando cruceros peatonales donde no existen con un spray blanco.
Afortunadamente, los esfuerzos de Cáñez cuentan con el respaldo de la población, lo que ha permitido generar algunos resultados tangibles en beneficio de los peatones. Por ejemplo, en agosto pasado, el gobierno de Ciudad de México redujo los límites de velocidad en las rutas primarias de 70 km/h a 50 km/h. Con esto se espera reducir la alarmante tasa de muertes que existe como consecuencia de los accidentes de tránsito, que actualmente asciende a 51 por cada 1,000 accidentes.
Los problemas de tránsito en Ciudad de México son enormes, considerando que se trata de la cuarta ciudad más poblada del mundo, donde existe la mayor concentración de automóviles de México, donde existe una infraestructura vial inadecuada y donde existe una falta total de cultura vial. Sus problemas, en gran medida, son comparables con los que vivimos en Lima y por eso la forma en la que están tratando de solucionarlos podría servirnos de inspiración.
Quizás el rasgo más importante de esfuerzos como los de Peatonito, es que forman parte de un ola de activismo que ha surgido desde la población como respuesta al caos y a la inseguridad en el tránsito en México. Por ejemplo, este mismo activismo ha conseguido que México decida a implementar la “Visión Cero”, una serie de políticas públicas que vienen siendo aplicadas desde hace dos décadas en Holanda y Suecia, orientadas a la erradicación de muertes por accidentes de tránsito.
Este activismo en Perú todavía es escaso y, cuando surge, es poco cohesionado y efectivo. Ojalá que comencemos poco a poco a imitar el tipo de acciones que han llevado a que Ciudad de México se decida a enforcar sus acciones y regulaciones más en el peatón que en los conductores de vehículos. Solo así podremos conseguir que caminar por las calles de las principales ciudades del Perú deje de ser la ruleta en la que todos los días exponemos nuestras vidas al riesgo de sufrir un accidente o incluso morir.
Publicar un comentario