En más de una ocasión nos hemos referido en este portal a los genes como mágicos determinantes de la vida. Pero, también de sus límites como estos mismos determinantes. Es decir, hasta qué punto nuestra vida depende de nuestra carga genética y en qué aspectos no son influyentes. Por supuesto, ninguno de nosotros es el primero en hacerse estas preguntas, y mucho menos en responderlas.
Uno de los estudios más recientes, analiza a profundidad esta pregunta con todos los avances científicos disponibles hasta el momento. Así lo vemos en el artículo “The Power Of Genes, And The Line Between Biology And Destiny” de NPR. En este, se muestra una conversación con el oncólogo Siddharta Mukherjee el cual, en su reciente libro “The Gene”, habla sobre la historia de la genética y explora el rol que juegan en diversos aspectos de nuestras vidas.
El oncólogo afirma que los genes no son completamente determinantes en nuestra existencia, en otras palabras, no son una especie de destino inescapable. Sin embargo, sí influyen de gran manera en algunos aspectos de nuestras vidas, por ejemplo, en la salud.
Mukherjee afirma que los genes nos afectan en una especie de espectro. Hay enfermedades que son completamente determinadas por los genes, como la fibrosis cística. En el medio del espectro se encuentran cosas como la diabetes o los problemas al corazón. Es decir, si algún antepasado te transfirió sus genes de cualquiera de estas enfermedades, esto no significa que vayas a contraerla. Finalmente, en el otro punto del espectro se encuentran problemas como la susceptibilidad al VIH. Esto no significa que si alguno de tus padres tiene sida, nunca lo tendrás, sino que más bien, los genes afectarán de alguna forma el resultado.
Por otro lado, un punto sumamente interesante que aborda, es el relacionado con la capacidad que tienen los genes de afectar nuestra identidad.
Mukherjee propone el ejemplo de los gemelos idénticos. En este sentido, señala que si uno de ellos nace con tendencias homosexuales, es probable que el otro también las tenga, lo cual significa que sí afecta la identidad sexual. Sin embargo, nuevamente, esta no es una regla escrita en piedra y podría ser que uno de los gemelos sea homosexual y el otro no lo sea. Aún no hay una certeza en eso.
Como se observa, los genes tienen diferentes roles en nuestras vidas, dependiendo de qué es lo que estemos hablando.
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