Los super alimentos

La reciente preocupación por la salud ha hecho que muchas cosas cambien en nuestra vida diaria. Ya no se trata de comprar solo lo que nos gusta, sino que ahora es importante orientar nuestro consumo a aquello que nos hace bien. Para comprobarlo, basta ver las cifras europeas: el 72% de franceses prefieren frutas y verduras que productos procesados, el 71% en caso de Alemania, 73% en Italia y 72% en España. Lo interesante es que ahora hay números que reflejan qué tanto ha crecido esta tendencia. Precisamente, una reciente investigación de Mintel ha establecido que la demanda de los super alimentos está al alza. Se trata del Global New Products Database de Mintel (Base de Datos Global de Nuevos Productos), que revela que entre 2011 y 2015, ha habido un incremento de 202% a nivel mundial en el número de nuevos productos alimenticios y bebidas. Lo más importante de la investigación es que parece que la tendencia seguirá porque en 2015, creció 36%, siendo EE.UU. el país de mayores lanzamientos (30%), seguido por Australia (10%), Alemania (7%), Reino Unido (6%) y Canadá (6%).

¿Cuáles son esos super alimentos?

Los “granos ancestrales” se han convertido en la opción mayoritaria para quienes quieren dejar el trigo. En esta categoría está la quinua, pero la que más habría crecido es la chía con 70%, mientras la quinua se conformó con un aumento de 27% en ventas que ciertamente no es nada despreciable. Las semillas son otro alimento que se ha vuelto muy popular por su gran contenido proteico, además de nueve aminoácidos esenciales. Entre las semillas que más éxito están teniendo están las de calabaza, y, las de chía, aunque cuando se las mezcla, la combinación puede ser aún más poderosa.

Hacia futuro, la cúrcuma o la moringa parece que serán otras alternativas interesantes por sus propiedades antiinflamatorias, para prevenir el antienvejecimiento, entre otros. Esto explica que se le esté usando en las bebidas funcionales y alimentos, sobre todo para personas adultas mayores. Como consecuencia de esta mayor demanda y popularidad de estos alimentos, las empresas están innovando en presentaciones antes poco usuales como elaborar pastas de harina de quinua como una alternativa más saludable que una pasta de trigo. Algo similar ha ocurrido con las bebidas, donde no solo se están utilizando granos ancestrales, sino también lentejas y guisantes, algo que hasta hace muy poco, hubiera sido impensable. Esto es importante porque el Perú podría ser un proveedor de nuevos productos para la comida étnica. Todo una oportunidad en la que hay que ponerse a pensar.