Del puerto, al estado que se reinventa

Normalmente, estamos acostumbrados a reciclar papel o botellas de agua que sabemos se vuelven a utilizar en nuevo papel o en tela que se convierte en ropa. Si hacemos uso del pensamiento lateral, en realidad casi todo es reciclable, reusable o reinventable ya sea que tratemos de productos o entidades con edificaciones incluidas.

El caso del Puerto 1 en Los Ángeles es uno de esos que puede ayudar a ampliar nuestra visión. En el artículo de CO.EXIST titulado “Los Angeles Is Converting An Abandoned Dock Into A Huge Ocean Research Center”, se da cuenta que el antiguo puerto fue creado para aprovechar las nuevas rutas de intercambio aparecidas gracias al Canal de Panamá. Sin embargo, con el advenimiento de los buques de carga en los años sesenta, el puerto quedó inutilizado, ya que era demasiado pequeño para el tamaño de las naves que transitan por dicho Canal.

Ahora la ciudad ha decidido convertir este puerto en un Centro para la Investigación Marina, con el fin de aprovechar las instalaciones y equipamiento con tecnología de punta para científicos, estudiantes y startups, que en situaciones normales no podrían costear su construcción.

La idea es convertir el puerto en un campus que sea sustentable, es decir, que funcione con energía solar, el viento, el vapor, además de utilizar el agua marina para enfriarse.

El Centro para la Investigación Marina incluirá laboratorios marinos, salones de clase, oficinas, y un tanque masivo de agua para estudiar tsunamis y otros fenómenos marinos. Los primeros pasos por ahora estarán enfocados en la acuicultura, respecto de la cual se ofrecerán clases y talleres. Además, se promoverá la extracción responsable de peces y demás especies marinas por lo que se espera que sirva para enseñarles a los niños la importancia del cuidado del mar.

También, se planea que el lugar tenga un enfoque con tecnología robótica marina, y que permita que las compañías puedan inventar y probar sus productos al instante, aprovechando el lugar donde se encuentran.

En el Perú, estamos próximos a un cambio de gobierno y es normal que surja la tentación de crear nuevas entidades. El caso de este puerto plantea también tener a la vista la posibilidad de recrear, repotenciar y reorientar las que ya existen.

No hay que perder de vista esta posibilidad.