IDEAS
Si no te alcanza para el nido, que tus hijos vean “Plaza Sésamo”
Plaza Sésamo es el nombre que en 1972 tomó en América Latina la adaptación de Sesame Street, serie creada por Joan Ganz Cooney y Lloyd Morriset con el apoyo en la animación de Jim Henson´s Muppets, y que comenzó a ser transmitida en los Estados Unidos en 1969.
Sesame Street tuvo la capacidad de llegar casi a las dos terceras partes de niños en edad pre escolar (que recibían la señal VHF en los Estados Unidos) y, en algunos países, también a sus padres. Por ello, la primera dama de los Estados Unidos, Michelle Obama, recientemente eligió a los personajes de Sesame Street, Elmo y Rosita, para que la ayuden a difundir la campaña contra la obesidad, desde el huerto de la Casa Blanca.
Con algunos de los personajes de la serie era posible aprender las vocales (con Lola); o las sílabas (con Elmo); o la importancia de la higiene (con Paco Pico).
Hasta hace muy poco no se conocía mucho respecto del impacto que podría haber tenido ese esfuerzo de la producción por contribuir a la educación de los niños. Un estudio denominado Early Childhood Education by Mooc: Lessons from Sesame Street de Melissa Kearney, profesora de economía en la Universidad de Maryland, y Phillip Levine, profesor de economía en la Universidad de Wellesley, encontró que el programa de televisión Sesame Street ayudó a mejorar la preparación escolar de las generaciones que la disfrutaron.
La bondad del análisis realizado por estos investigadores es que valida de forma preliminar el uso de un medio de comunicación masivo (Massive Open Online Courses, MOOCs) y con gran cobertura para impactar positivamente en audiencias determinadas (minorías de menores ingresos) y para prepararlos para afrontar la escuela primaria a un costo individual muy bajo (USD 5 por persona). Según los autores, ver la serie podría reemplazar el paso por el nido o kindergarten, por lo menos en lo que se refiere a la adquisición de contenidos y habilidades.
La investigación no profundiza en los logros educativos que pudieran haber tenido posteriormente los niños que fueron impactados por la serie, pero claramente da luces sobre la importancia de contar con formas creativas de enseñanza.
Esto es esperanzador para que el Estado pueda diseñar programas que permitan contribuir a homologar las capacidades de niños en edad pre-escolar, incluso para fomentar buenas prácticas de higiene, de vacunación, o buenos hábitos alimenticios y complementar los Programas Sociales.
En países como el Perú, en las zonas rurales pueden faltar muchas cosas pero es raro que falte un televisor. La canalización de contenidos a través del televisor puede permitir suplir una ausencia en esfuerzos de estimulación temprana de la propia familia y beneficiar a millones de niños.
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