Los retos del nuevo CEO de Coca Cola

La noticia de la designación de un nuevo Chief Executive Officer no tendría por qué ser relevante más allá del ámbito de la propia empresa que este vaya a conducir. Sin embargo, si se trata del nuevo CEO de Coca Cola, la transnacional más importante del mundo de las bebidas azucaradas y una de las más connotadas Lovemark, sí tiene sentido que genere tanto interés.

Se trata de James, Quincey, cuya designación se hará efectiva desde el primero de mayo de 2017 y quién tendrá en sus manos el destino de la Coca-Cola Co. En los próximos años, según da cuenta IBTimes, en su artículo titulado Who Is James Quincey? Coca-Cola’s Incoming CEO Under Pressure To Drastically Cut Calories In Product Lineup, sobre el que se basa esta nota.

Y es que parece que en lugar de llegar solo con buenas ideas, asume el cargo con un mandato de la Junta Directiva para reducir las calorías de la línea de productos de la empresa. Por su parte, Muhtar Kent permanecerá como presidente de la Compañía.

Quincey, un empresario británico de 51 años, lleva 20 años en la empresa y hasta ahora se venía desempeñando como jefe de operaciones de esta, puesto desde donde ha tenido a su cargo la campaña de la empresa para reducir la cantidad de azúcar en las bebidas.

En su presentación, Quincey ofreció continuar la tarea de luchar contra la obesidad e introducir más bebidas bajas en calorías. Además, aprovechando la experiencia adquirida en su puesto de jefe de operaciones, anunció que modernizará el sistema de distribución de la empresa para promover más compras en línea

Los analistas confían en que su designación traiga aire fresco a la compañía que en los últimos años ha tenido que enfrentar duras críticas por intentar contratar estudios científicos que señalen que los problemas de obesidad son causados por las grasas y no por las bebidas azucaradas, tratando de culpar a otros.

Quincey es considerado alguien capaz de llevar a la empresa por la senda de las innovaciones para conseguir acabar con una preocupación que afecta sus ventas y que tiene que ver concretamente con la cantidad de azúcar que tienen sus bebidas. Precisamente, su anterior experiencia fue con el desarrollo de bebidas en botellas pequeñas y latas para que los consumidores no dejen de darse el gusto de consumir sus productos, pero al hacerlo que tomen menos calorías.