La situación de Grecia se complica

Desde hace unos años, la situación económica de Grecia se encuentra en un estado deplorable. Su enorme deuda con distintos países ha hecho que esta nación europea viva momentos sumamente difíciles. Esta situación parecía estar a punto a cambiar cuando iniciaron las conversaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI), el cual planteó soluciones para ayudar a Grecia a superar su deuda.

Pero, nuevos problemas han complicado la realización de estos planes. El FMI ha presentado dudas respecto a las proyecciones de la economía griega, debido a distintas políticas locales. Esto ha hecho que la segunda revisión del programa de rescate a Grecia, de USD 92 mil millones, se estanque, afirma el artículo de Bloomberg, titulado “Greece Hits Back Against IMF as Bond Market Remains Spooked”.

El FMI afirmó que Grecia debía reducir la proporción del presupuesto destinado en pensiones altas, las cuales son pagadas por elevadas tasas impositivas para tratar de estimular el crecimiento económico. La entidad internacional afirmó que el país debería enfocarse en realizar políticas que aumenten la base de los impuestos y reducirlos, de forma que se pueda apoyar de mejor manera a los pobres y los servicios públicos. El FMI reiteró que todo esto tiene como objetivo convertir el presupuesto de Grecia favorable al crecimiento.

Las autoridades griegas contestaron rápidamente al anuncio del FMI. Euclid Tsakalotos, Ministro Financiero de Grecia, afirmó que las declaraciones de la entidad internacional estaban basadas en información antigua. Las autoridades están decididas a concretar un trato entre los acreedores en una reunión con los ministros de finanzas de la zona del euro en Bruselas, antes del 20 de febrero. Esto se debe a que después de la fecha se celebran las elecciones holandesas, lo cual puede complicar la situación aún más.

Sin embargo, el panorama no se ve del todo positivo para Grecia debido a opiniones enfrentadas entre miembros de la Unión Europea y el FMI. Este último ha trazado distintos planes para rescatar a Grecia, pero ha afirmado que ninguno de ellos es viable sin que algunos países perdonen parte de la deuda de Grecia. Ante esto, países como Alemania se han manifestado fervientemente en contra, afirmando que es imposible que procedan con esta estrategia, ya que necesitan el dinero que se les debe.

Debe ponerse fin a esta situación y Grecia se encuentra contra el reloj. Algunos estudios del FMI han encontrado que las necesidades de su deuda pueden tornarse “explosivas” para el año 2030. En otras palabras, de no ser solucionado rápidamente, la situación podría impactar en lo más profundo de la economía griega.