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KFC y el pollo sin antibiótico
KFC, se une a las otras empresas en los EE.UU. que optan por eliminar a los antibióticos de los pollos.
El presidente de KFC US, Kevin Hochman, anunció que a finales de 2018, la franquicia venderá solo pollo sin antibióticos, lo cual es una tremenda contribución a la salud de sus clientes, que cada vez generan más resistencia a los antibióticos como consecuencia del consumo de carne de animales tratados con estos, los cuales terminan en el organismo de los seres humanos.
Precisamente, el afán de atender los reclamos o demandas de los consumidores, es que han tomado la decisión y asumido el compromiso de trabajar con pollos criados sin antibióticos.
El proceso para lograr este propósito implica todo un planeamiento con más de 2000 granjas proveedoras con las que trabaja la empresa en 12 estados, según da cuenta un interesante artículo de Food Business, titulado KFC announces antibiotics pledge, sobre el que se inspira esta nota. Además, para poder asegurar que todas las granjas se comprometan con este objetivo usarán un programa de verificación de la U.S.D.A.
Es importante destacar que este anuncio se suma a otro anterior donde se indicó que la empresa eliminaría el uso de colorantes y saborizantes artificiales también a finales de 2018, con excepción de bebidas y otros complementos.
La decisión que toma KFC es importante directamente para la salud de sus clientes, quienes disfrutarán del mismo pollo sazonado con la receta secreta, con la garantía que este no ha sido criado ni medicado con antibióticos. Pero, además, es un ejemplo para otras empresas del rubro de alimentación que ofrecen productos a base de carne.
Y finalmente, lo más importante, es que cuando esta exigencia proviene del mercado, ellos son clientes de más de 2000 granjas, estas últimas se ven obligadas a adaptarse a los nuevos estándares y a atender una preocupación del mercado que les puede acarrear inversiones adicionales, pero como contraparte mantienen la relación de trabajo con una cadena que domina una posición importante del mercado del pollo frito en los EE.UU.
Lo que habría que preguntarnos es cuándo llegará esta misma preocupación a los Master Franquiciados de los países de América Latina que hemos crecido consumiendo KFC y a quienes nos gustaría saber que la empresa se preocupa también por nuestra salud y se anima a trabajar con su cadena de proveedores de pollo para ofrecernos aves criadas sin antibióticos.
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