Si tuviste un mal día en el trabajo, no lo lleves a casa

Si tuviste un mal día en el trabajo y estás molesto, triste, frustrado o herido, piénsalo dos veces antes de abrumar a tu pareja con tus quejas porque esto les puede afectar la capacidad pare relajarse o descansar. 

Por supuesto que esto no quiere decir que no debas compartir con tu pareja lo que te ocurre en el trabajo. El problema con las quejas, sin embargo, se produce cuando estas ocupan demasiado tiempo. Y no es un problema de las personas. Comúnmennte los problemas de trabajo son difíciles de resolver y por eso es que las personas se extienden mucho cuando hablan de ellos. Los expertos recomiendan fijar un tiempo máximo por día para las quejas de entre 5 y 30 minutos.  

Sin embargo, siempre es importante tener presente que el estado de ánimo negativo es contagioso. Si tu pareja viene del trabajo con muchas quejas, a continuación una lista de las posibilidades que tienes para reaccionar.

• Escuchar y mostrar empatía. Escuchar y simplemente soltar algunas frases como “te entiendo” puede tener un efecto mágico sobre el ánimo de tu pareja. Esto no significa que estés totalmente de acuerdo con lo que tu pareja te cuenta. Simplemente, significa que lo entiendes. 
• Dar consejo. Sin embargo, debes evaluar bien si lo que necesita en ese momento tu pareja es alguien que lo aliente o una persona que le diga qué hacer.
• Pedir permiso antes de opinar o plantear una solución. Esto es muy importante pues tu pareja puede estar muy sensible y tener algunas ideas sobre qué hacer.
• Trata de ser neutral. Incluso cuando pienses que tu pareja no tiene la razón, debes tratar de mantenerte neutral. Para eso, preguntas como ¿Qué crees que está pensando tu jefe al respecto? ¿Qué le puede estar motivando a hacer eso? te pueden ayudar.

Si quien ha tenido el mal día en el trabajo eres tú, trata de que regresar a casa no sea lo primero que hagas. Toma un poco de aire y camina un poco. Cuando llegues a casa, pregúntale a tu pareja si es un buen momento para contarle o no tus problemas en el trabajo. O, mejor aún, sugiérele compartir alguna actividad física luego del trabajo. Notarás que cuando hayan terminado de caminar o correr, buena parte del estrés del trabajo habrá desaparecido. 

Finalmente, recuerda que la mejor manera de protegerte para que los problemas en el trabajo no te afecten tanto es tener una vida en pareja feliz, tal como lo señala un estudio reciente de la Universidad de Georgia que se basa en la revisión y análisis de 85 estudios sobre el tema.