La transición de Disney de discriminar a incluir mujeres

Las mujeres han tenido que batallar mucho para abrirse un espacio en muchas ocupaciones profesionales y técnicas de diferentes industrias. Por eso, es interesante conocer cómo la inclusión de la mujer en las empresas ha ido evolucionando y las circunstancias que habrían contribuido a que las empresas tengan una visión más abierta para admitir la participación de la mujer. 

Una reciente nota publicada en Vox da cuenta de una carta modelo que Disney enviaba a las mujeres en 1938 para rechazar sus aplicaciones a la escuela de entrenamiento  en áreas creativas con relación a los dibujos animados de la pantalla porque este era realizado en su totalidad por hombres.

El texto de la carta decía lo siguiente:

“…Women do not do any of the creative work in connection with preparing the cartoons for the screen, as that work is performed entirely by Young men. For this reason girlas are not considered for the training school…”

Esto no significa que Disney no empleara a mujeres desde esa época, pero lo hacía para el área donde se corrigen las animaciones, separada de donde actuaban los varones, y a eso se refiere también en la comunicación que les envía.

“…The only work open to women consists of tracing the characters on clear celluloid sheets with India ink and filling in the tracings on the reverse side with paint according directions…”

Lo interesante es que pocos años después, debido a la guerra, Disney tuvo que cambiar su filosofía y empezó a capacitar a las mujeres también para la animación.  De alguna manera, la crisis que provocó la guerra obligó a empresas como esta a tratar de preparar perfiles de mujeres más versátiles y flexibles que pudieran mantener la producción constante.

Es probable que más tarde esta apertura también estuviera motivada por el deseo de ofrecer las mismas posibilidades de desarrollo profesional a hombres y mujeres, pero claramente lo más importante fue la propia necesidad empresarial la que motivó esa mayor apertura. No obstante, eso no significa que no haya un espacio para seguir luchando por lograr que las mujeres tengan las mismas oportunidades que los hombres. La propia Disney  recién tuvo una cineasta mujer en 2013.

Solo para dar un ejemplo, en muchas legislaciones ya se establecen cuotas para asegurar la presencia de la mujer en la política. Sin embargo, también hay sectores donde hay poca presencia de mujeres como en la ciencia, tanto en economías desarrolladas como en las menos desarrolladas. Por eso es tan importante, la campaña iniciada por la actual Primera Dama estadounidense para luchar para que las niñas, principalmente en países de Africa y Asia, tengan la misma oportunidad de acceso a la educación que tienen los niños.