IDEAS
Para comer sano, simplemente muévete más
Si tienes algún problema de sobrepeso o colesterol alto, ya conoces un poco la rutina de los controles médicos y, sobre todo, de las recomendaciones que te hará el médico cuando reciba los resultados de tus análisis. “Coma sano y haga ejercicio” son los consejos infaltables en toda charla con el médico. Sin embargo, muchas veces es difícil seguir las recomendaciones médicas y no caer en la tentación de comer aquello que tanto nos gusta (que suele ser lo que más daño nos hace). Y romper el círculo vicioso de la vida sedentaria es difícil. ¿Por dónde empezar?
Un estudio publicado la semana pasada en el Journal of American College Nutrition tiene una respuesta que es bastante conveniente pues nos permite enfocarnos en solo un objetivo para mantener el peso y el colesterol bajo control: hacer ejercicio. Según este estudio, el consumo de frutas y vegetales se puede incrementar solo si es que una persona adopta una rutina de ejercicios moderados frecuente. Tras analizar las respuestas de 6,244 personas al US Department of Labor’s National Longitudinal Survey of Youth, los investigadores encontraron solo un bajo consumo de frutas y verduras en las personas que se ejercitaban muy poco. Por el contrario, aquellas que acostumbraban realizar ejercicios tenían un consumo apropiado de estos productos. Asimismo, aquellos que durante un tiempo no hacían ejercicio y lo comenzaron a hacer, mostraron un cambio en sus consumos de alimentos en favor de las frutas y verduras.
¿Por qué? La explicación que dan los científicos es que el hacer ejercicios con regularidad genera los siguientes dos efectos:
- En primer lugar, como hacer ejercicio y comer frutas y vegetales persiguen el mismo propósito de mantener un peso saludable, es fácil para quienes ya están haciendo ejercicio optar por una alimentación más saludable.
- En segundo lugar, una vez que una persona ya está habituada a hacer ejercicio, prácticamente no tiene que pensar en el esfuerzo que le genera hacerlo pues su rutina casi opera de forma automática. Gracias a ello, la persona tiene algo menos en que pensar y esto libera un poco de espacio en el cerebro para identificar actividades adicionales asociadas con un ritmo de vida saludable.
Es importante resaltar que el estudio advierte que lo que se recomienda es un ejercicio moderado (definido como 30 minutos por lo menos 5 veces a la semana) pues rutinas más exigentes pueden incluso reducir el consumo de frutas y vegetales precisamente por la gran cantidad de energía perdida haciendo ejercicio que luego las personas buscan recuperar con rapidez.
Publicar un comentario