La discusión de qué hacer con los embriones congelados tras una separación se volvió mediática, luego que el ex novio de Sofía Vergara, actriz de televisión, interpusiera una demanda para proteger dos embriones que crearon cuando estaban juntos. En este caso, lo más controversial era si el ex novio podía usarlos aun cuando ambos suscribieron un acuerdo respecto a que ambos debían estar de acuerdo con hacerlo.
Ahora, la juez del Tribunal Superior de California, Anne-Christine Masullo, acaba de resolver en una sentencia de 82 páginas que puede revisarse en dos partes (I y II), que una mujer, Mimi Lee, médico anestesióloga de 46 años de edad, no puede tener un hijo con ninguno de los cinco embriones fertilizados congelados desde 2010, mientras estuvo casada con Stephen Findley. Por lo tanto, esos embriones serán descartados.
Tal como señala la juez en su resolución, este es un precedente para equilibrar el derecho de la mujer a tener un hijo, y el derecho del ex marido a no tener uno, con una mujer que ya no es su esposa. Además, en este caso, el ex marido tenía un acuerdo de consentimiento de ambas partes que se firmó en el momento en que congelaron los embriones, el mismo que señalaba que estos se descartarían en caso de un divorcio y que cualquier cambio respecto a esa decisión se debería realizar con el consentimiento de ambos.
El caso llegó a la Corte por una demanda de Findley que no quiere tener un hijo con Lee por temor a que ella pida alimentos para este. Por su parte, Lee que ahora es estéril se aferraba a esos embriones para conseguir ser madre.
Para la juez, la suscripción del acuerdo fijó la posición de ambas partes de apostar por la maternidad en tanto estuvieran juntos y nunca, si este no era el caso. Otro aspecto que fue considerado, es que Lee nunca hizo mayores esfuerzos por ser madre mientras estuvo casada, que era una época en la que tenía mayores probabilidades de éxito de conseguirlo.
El caso es importante por las siguientes razones:
- Sienta un precedente en otros casos similares donde se debe tener en consideración las pruebas aportadas por las partes y la búsqueda de equilibrio entre los intereses de ambos.
- Muestra lo difícil que es decidir sobre si un niño puede o no nacer, dado que se está discutiendo sobre embriones.
- Cuestiona qué hacer con los 4 millones de embriones congelados que hoy se almacenan en EE.UU.
¿Qué crees tú? ¿Quién debe decidir sobre la suerte de esos embriones?
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