La dieta paleo no tiene sentido

Si has hecho alguna dieta o conoces a alguien que la está haciendo, debes haber oído hablar de la dieta paleo. La dieta paleo consiste en comer muchas proteínas (carne, pescado, vegetales, frutas y nueces) y pocos carbohidratos, bajo el supuesto que lo más saludable para las personas es replicar la dieta de nuestros ancestros del paleolítico. 

Sin embargo, un reciente estudio publicado en The Quarterly Review of Biology, reveló dos características poco conocidas de la dieta paleo que podrían cambiar nuestra percepción sobre ella:

• En primer lugar, la interpretación de la dieta de los ancentros paleolíticos está equivocada. De hecho, según los científicos, a nuestros antepasados les gustaba comer carbohidratos de la misma forma que hacemos nosotros en la actualidad, aun cuando los hayan recolectado en lugar de haberlos cultivado desde un inicio. 
• En segundo lugar, ha sido precisamente el consumo de carbohidratos el que permitió que el cerebro de nuestros antepasados crezca de tamaño hacia lo que es ahora el de los humanos. En efecto, para los investigadores, el consumo de carbohidratos fue crítico para la expansión acelerada del cerebro en los últimos mil años.

Un hecho clave que llevó a los investigadores a las dos conclusiones anteriores es que el cerebro utiliza el 25% de la energía del cuerpo y hasta el 60% de la glucosa que existe en la sangre. Con una dieta paleo como la que muchos practican, habría sido imposible alcanzar las demandas de glucosa de las personas y al mismo tiempo crear las condiciones para un desarrollo acelerado del cerebro. 

Finalmente, probablemente el mérito que más destaca de la investigación es que a través de una revisión  de la evidencia disponible en materia arqueológica, genética y fisiológica, los investigadores pudieron probar que los carbohidratos son complementos de las proteínas y que no pueden de ninguna manera tratarse como sustitutos porque esto podría perjudicar la salud de las personas. 

Así que ya lo sabes: la mejor dieta no es la de las privaciones sino la que consigue balancear adecuadamente los alimentos para cumplir con las demandas nutricionales del organismo.