Logo oe

Explotar por email puede dañar tu reputación

Larger anger
Arrow red
PARA ARISTÓTELES, LA CATARSIS PERMITÍA PURGAR LAS EMOCIONES.
20 de agosto de 2015
Red star
Por qué es importante
Un exabrupto por email o por las redes sociales puede dañar tu reputación.

La necesidad de expresar nuestras emociones y descargarlas es tan antigua como la vida misma. Desde hace siglos, diversos autores ya se han ocupado de analizarla y justificarla. Para Aristóteles, el proceso se denominaba catarsis y permitía purgar las emociones. Más recientemente, Sigmund Freud desarrolló lo que denominó el modelo hidráulico a través del cual trataba de explicar que cuando una persona mantenía rencor dentro de si y no lo dejaba salir, lo que estaba creando era una olla a presión que en algún momento puede llegar a niveles insostenibles y explotar. 

Seguramente tú mismo la has experimentado y te has sentido mejor después de haber descargado tu rabia y tu decepción frente a alguien. Sin embargo, los expertos advierten que no todo lo que te hace sentir bien es necesariamente saludable o bueno para ti. 

Por ejemplo, si explotas con tus colegas, tus amigos o tus familiares, no solo corres el riesgo de distanciarte de ellos sino que además te expones a ser calificado como una persona que se queja de todo o que sobrereacciona por todo. Es decir, el costo de explotar puede ser un daño importante a tu reputación.

Esto se agrava aún más si la descarga de tus emociones se produce por vía electrónica. Actualmente, a diferencia del pasado, los exabruptos ya no necesitan ser en persona sino que pueden ser hechos a través de Facebook, Twitter o, por supuesto, a través de un email o un chat. La tecnología ha hecho que explotar sea más fácil, rápido y seguro (de hecho, casi siempre estamos detrás de una pantalla). Sin embargo, justamente estas ventajas son las que hacen que los exabruptos puedan generar un mayor daño potencial a tu reputación por las siguientes tres razones:

  • En primer lugar porque todo lo que se expresa por escrito suena más grave de lo que realmente es.
  • En segundo lugar porque todo lo que queda por escrito se puede leer más de una vez y esto puede también contribuir a que una situación de tensión se prolongue innecesariamente o que un simple comentario merezca una reacción desproporcionada.
  • En tercer lugar porque cuando se dice algo por escrito no es posible recibir directamente el feeedback de la contraparte y esto a veces nos predispone a exagerar un poco más para expresarnos. 

Así que ya lo sabes: todos tenemos un mal día y estamos expuestos a desazones y desilusiones. Sin embargo, para no correr el riesgo de dañar a nuestros seres queridos o afectar nuestra reputación, la mejor manera de manejar estas situaciones no es explotando inmediatamente sino tomando distancia, retrasando la reacción, desconectándonos de los dispositivos electrónicos, distrayéndonos o comiendo algo saludable. Si transcurrido un tiempo, igual queremos reaccionar, hagámoslo a la antigua, en persona y nunca utilizando un medio electrónico.