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Las super estrellas pueden ser tóxicas para el clima laboral
Un reciente estudio denominado Toxic Workers, elaborado por Michael Husman y Dylan Minor, de la Universidad de Harvard examina la paradoja del trabajador super estrella que a la vez es el más productivo, pero que puede ser el más tóxico para la equipo por su soberbia con el resto de sus compañeros y su especial talento para provocarlos y bajarles la moral.
El estudio alude a estudios que ya han encontrado conexión entre toxicidad y productividad por lo que los investigadores recomiendan preferir contratar a empleados promedio antes que a uno super estrella que puede llegar a ser un colaborador super tóxico que incentiva a que otros compañeros decidan dejar la empresa.
Para llegar a esta conclusión los investigadores usaron información de 50 mil trabajadores para documentar una serie de datos y circunstancias vinculadas a comportamientos tóxicos en los cuales habían estado involucrados. También exploraron la relación entre la toxicidad y la productividad, y el efecto que tiene sobre sus compañeros. Gracias a ello, llegaron a la conclusión que evitar un trabajador tóxico mejora el rendimiento del grupo más que sustituir a un trabajador promedio por uno que sea super estrella.
Esto significa que las empresas deben preferir contratar a trabajadores menos productivos pero que se preocupen por sus colegas, antes que a uno que los desprecia por sentirse muy superior a ellos.
Lo complicado de seguir esta recomendación es que la única forma de detectar de forma anticipada este tipo de inclinación es usando pruebas psicológicas con los candidatos que permitan identificar su inclinación a colaborar y ayudar a otros. Evitar la contratación de un trabajador tóxico puede costar alrededor de USD 12 500 y la contratación de la super estrella aporta solo USD 5300 . Sin embargo, dado el impacto que puede tener una mala contratación en el equipo, es más saludable y eficiente económicamente invertir en el proceso de detectar preventivamente a los trabajadores potencialmente tóxicos.
Si el trabajador tóxico ya forma parte del equipo, la otra posibilidad es neutralizarlo introduciendo la figura de alguien de jerarquía superior que evite que la super estrella haga de las suyas en el equipo, o, contrarrestar cualquier factor ambiental que incentive la conducta tóxica. No obstante, lo más importante es evitarlo porque al hacerlo puede lograr mejorar los resultados más que si solo se centra en lo que significaría el impacto positivo de la super estrella.
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