Un negocio agrícola a prueba de sequías

Definitivamente, el año 2015 no ha sido uno bueno para la agricultura californiana debido al cuarto año de sequía que azota al Estado Dorado, la peor en cinco siglos. La situación es grave, tomando en cuenta que California es el principal productor en Estados Unidos de cultivos intensivos en el consumo de agua, tales como almendras, tomates, melocotones y alfalfa. Algunos investigadores están buscando formas de hacer que los cultivos sean más resistentes a la sequía. Otros estudios buscan reducir al mínimo el consumo de agua en los procesos productivos.

Una idea diferente consiste en impulsar cultivos que dependen en menor medida del agua, tales como el cactus. De acuerdo con un artículo publicado en FastCompany, una diseñadora ha propuesto cultivar nopal (conocido en el Perú como tuna), el cual es tolerante a la sequía y puede servir de alimento al ganado. Ali Chen, ganadora de la categoría Speculative en el concurso Dry Futures de Archinect con su proyecto conceptual Grasroots Cactivism, planteó un modelo que comprende una enorme granja de nopal, con el cual se podría obtener comida para la gente y para ganado, y también permitiría tratar aguas residuales. El diseño propuesto por Chen es una respuesta basada en el pensamiento sistémico al desafío que representa un futuro cada vez más seco en la región.

El proyecto plantea tres tipos de usos para el nopal: (i) una parte será destinada como ingrediente para consumo humano; (ii) otra parte será convertida en pulpa para alimentar biorreactores de una planta de tratamiento de aguas residuales que forma parte del proyecto, aprovechando la cualidad de los cactus de ser filtros naturales de agua; y (iii) el resto será procesado como alimento para ganado. La alimentación del ganado vacuno incluye alfalfa, el cual consume gran parte del agua de las granjas californianas. El nopal es un complemento saludable a la alimentación del ganado, y ya está siendo usada en regiones vulnerables a la sequía como Texas.

El proyecto se enfoca más en la idea de proponer un cultivo alternativo que en crear una metodología o un diseño revolucionarios, por lo que aprovecha en su diseño las tecnologías existentes para la producción agrícola. En el diseño propuesto, los nopales crecen en parcelas circulares con el sistema de irrigación al centro, un formato usado principalmente en zonas desérticas. La planta de tratamiento de aguas residuales permitirá minimizar costos de transporte y combustible. La diseñadora considera que la granja de nopales podría convertirse también en un sitio turístico.